Pieza - 28 de marzo -

Esta fue mi pieza

cuando arribé a tierra helvética en 2008.

Fuí acogida por quién hoy es una amiga muy querida, que algo conoce de estigmas y me brindó la posibilidad de cobijarme en una habitación de su casa.

Fuí muy feliz allí.

Escribí, medité y bailé.

Los tres mandamientos de mi vida.

Siempre reinó ese desorden ordenado,

capaz de darme la impresión que no estoy en un museo estático y pulcro y aséptico,

y al mismo tiempo lleno de rinconcitos.

Para algunos serán chucherías para otros como yo, pequeños objetos relacionados con momentos de mi vida y encuentros preciosos.

Vos también tenés lugar en esos rinconcitos.

A vos también te pensé y te llevé simbolicamente en mi valija.

Algunos acumulan muebles.

Otros, valijas.

Creo que no hace falta aclaración alguna.

Te quiero.